Y tu llaga es mi daga

Este soneto quiere ser una contribución en la lucha contra la violencia de género.


Los golpes que recibes, oh mujer,
son embates contra la humana esencia;
no tolero en el mundo la vileza
del macho que por bárbaro es tan cruel.

Por tu ardor eres luz en el camino,
de mis versos ardientes eres chispa;
pues amor no es amor si no hay justicia
en mi canto soy adarga y soy contigo.

Y tu llaga es mi daga. Y es mi verso
proclamar que tu afán lo hacemos nuestro
hombres justos que en ti vemos el sol.

Ser, pues, tibio en la lucha es cobardía
que tu causa es la rosa de la vida
y las rosas se agostan sin amor.