Árbol vivo

Verde oscuro renace
entre forcejeos de viento
entre la noche perdida.



Deja que le caiga
el alma sobre las ramas,
se pinta de certeza los brotes,
y sorbe tragos de firmeza
poco a poco desde su raíz.
Hace que sus brazos
crezcan tersos y altivos,
sus anillos son su traje
que ha ido cosiendo
con hebras de luna llena,
con un segundo de cien minutos
con poder para tocar las nubes.

Verde oscuro es el hueco
de las ideas olvidadas
donde las hojas muertas
buscan cobijo de piel,
de tacto fuerte y sereno
donde poder descansar.