Si no hay paz (3)

Extraída de Gooble

Llegó la Navidad 
del Niño que esta vez se me aparece 
entre los indefensos 
que imploran nuestro auxilio.

Las calles resplandecen 
y hay gente que llenándose de gozo 
ignora la desgracia 
como a pariente incómodo. 

Mientras la rabia sigue 
como implacable endriago 
cargando los fusiles 
de tanto miserable. 

En medio del terror 
que no entiende de pueblos… 
el alambre de espino 
y los muros de acero. 

Y es el odio el que observa
la vitrina excluyente 
y clava la discordia 
y explosiona en la Tierra. 

Llegó la Navidad en Occidente, 
y hay niños refugiados 
que no tienen hogar 
e imploran nuestro amparo. 

Ojalá que el Nacido se nos quede 
en la cuna del alma, 
y el mundo que en su espíritu se mece 
insufle bien de amor a la esperanza.