La piscina

Extraída de Google.
Montaje. Lilu


       Salgo de casa cuando el reloj de la iglesia da cinco campanadas. El sol lame con fuerza los escalones de poniente. Vienen conmigo Daniel y Adrián, mis sobrinos nietos, siete y cinco respectivamente. Vamos los tres igual: traje de baño, gorro, chanclas y toalla.
       Poco importa que mi gorro sea de mago, negro y puntiagudo, y sus gorras ambas con visera curva. Al llegar al complejo recreativo yo enseño mi bono mensual y ellos pagan la sesión a un euro cada uno. Antes de bajar al agua de la piscina nos duchamos. Luego vienen los juegos, ellos dos contra mi...
felicidad.